Audiometría infantil y escolar

Es una prueba práctica, simple y de fácil instrucción, que se debe realizar cuando el niño no supera el screening (tamizaje) auditivo a recién nacidos o a escolares, cuando los familiares o el maestro notan que tiene dificultad auditiva o cuando el pequeño dice que tiene dificultades para oír.

Niños mayores

Con los niños mayores se utiliza básicamente el procedimiento que se sigue con los adultos: se indica que aprieten un botón o levanten el brazo, cuando escuchen un sonido a través de los auriculares.

Niños pequeños

Con los niños pequeños se utiliza el procedimiento de audiometría con dinámica de juego, que consiste en utilizar una técnica de juego cada vez que el niño escucha un sonido, a través de los auriculares.

Así, jugando, los niños suministran información sobre la audición de cada uno de sus oídos.

Además, se realiza un test de emisiones otoacústicas, mediante sonidos emitidos a través de un pequeño altavoz, para examinar el funcionamiento de la cóclea. Un micrófono permite registrar la respuesta (la emisión) procedente de la cóclea.

El examen no causa dolor ni molestia. Se realiza en ciertas frecuencias y depende de la madurez del paciente, que se realice una prueba de audiometría completa.

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